SANDWICH DULCE DE CREMA, MEMBRILLO Y CHOCOLATE

Me escribieron de Santa Teresa sobre un concurso de sandwich

El único requisito es que debe contener al menos uno de estos ingredientes: Mayonesa, Ali Oli, Membrillo o Huevo Hilado y como me apetecía hacer algo que no había puesto en el blog, he decidido hacerlo y si me es posible por el poco tiempo que queda, hacer mas versiones diferentes de sandwich, eso que tantas veces nos ha sacado de un apuro.

Hace años leí de donde venía ese nombre y la historia es una de tantas por las que casualmente se hace famoso un determinado alimento o un nombre para reconocerlo.

Cuentan que a John Montagu IV, Conde de Sandwich (1718 -1792) su pasión por las cartas le llevaba a descuidar las comidas, lo que llegó a preocupar a sus criados, quienes empezaron a prepararle una comida que pudiera tomar sin dejar de jugar.
Así nació este emparedado, compuesto por pan de molde con algún tipo de fiambre, queso, o similar, en el interior.

Lógicamente todo evoluciona y aunque queda el nombre hay miles de variantes del mismo.

Esta receta es una de ellas.
He pretendido hacer un dulce original, rico, saludable y sencillo y creo que lo he conseguido.


INGREDIENTES: (para 4 raciones)
4 rebanadas de pan de molde sin corteza
2 láminas de 1/2 cm. de espesor de membrillo de Santa Teresa
1 sobrecito de preparado para natillas
400 cc. de leche semi desnatada
1 huevo
6 cucharadas de fructosa (o 7 colmadas de azúcar, al gusto)
1/2 cucharadita de canela en polvo
1 puntita de cardamomo molido
Fideos de chocolate

Hacemos las natillas
Yo utilicé Thermomix, por lo que voy a dar las instrucciones tal y como las hice.
Siempre queda la manera tradicional, la de toda la vida.

Poner en el vaso la leche, abrir el sobrecito de natillas y echar todo el contenido.
Programar 90º veloc. 4, 10 min.
Cuando pare la máquina, incorporar el azúcar, canela, cardamomo y el huevo, programar 100º veloc. 5, 7 min.
Cuando finalice el tiempo dejar unos 2 minutos mas, a veloc. 3, sin calor, para que pierda alguna temperatura.

Poner sobre cada rebanada una cantidad generosa de crema y dejar que se enfríe un poco.


Cortar una loncha de membrillo como de 1/2 cm. de espesor, a la medida del pan (esta es mas pequeña pues me tuve que adaptar a la medida del envase)

Cerrar y napar por todos lados con el resto de las natillas. Dejar que se enfríe del todo.
Es mejor dejarlo varias horas en el frigorífico bien tapado (poner por encima unos palillitos y cerrar con papel de aluminio) Esto hará que el pan se empape y resultará mas jugoso y tierno.


Al momento de servir cortaremos dos triángulos de cada pieza y decoraremos la parte de arriba y laterales con fideitos de chocolate


Y aquí está, adornado con unas hojas y pétalos de clavel y unos petalitos de caléndula amarilla